miércoles, 11 de septiembre de 2013

"La depre"

Dicen que las personas nacemos con características que nos hacen únicas, irrepetibles, inimitables y demás. Algunos son pelirrojos, albinos, morenazos, paliducho tipo gasparín (como su servidora), algunos son pacientes y amorosos, otros no tienen dulzura ni pa decir buenos días. Algunos tienen obsesiones curiosas, miedos particulares, hay personas olvidadizas, que viven con diabetes, presión alta, manías extrañas, bipolaridad... La lista podría seguir.
Mi punto aquí es decir que si, es cierto que nacemos con cuestiones que nos hacen únicos, algunas de estas cosas son muy lindas, como ese lunarcito sexy que uno le ve al titi, o lo divertido que camina aquella, pero también hay algunas cositas que no son tan divertidas ni de ver, ni de experimentar. A mi entre mi colección de "exclusividades", me regalaron una condición depresiva que se las trae.
A ver, aclaremos primero algo: NO vamos a entender por depresión como la expresión comúnmente usada por muchos, para hablar mas bien de una "aguevasón" de mierda porque perdió la sele, me dejo la guila o no me alcanzo la chochozca (diría mi madre). Tampoco es la modita "aborrecente" de este montón de carajillos con pavas de color negro, pantalones tubo y cortadas en los brazos porque "el mundo es cruel", no, no señores eso no es depresión y en este tema no me voy a meter mucho, por respeto y para no encanfinarme de gratis. 
Lo que es importante que quede claro es que cuando digo "depresión" se debe entender como una condición de salud, que es generada por una particularidad química en el cerebro, que puede ser tratada con atención psiquiátrica o psicológica, en el mejor de los casos con ambas. Ah es que usted no cree en la psicología? bueno le cuento que también hay pastillitas para eso. Pero bueno como este blog no es para ponerme a filosofar sobre la psicología, las medicaciones y chocheras mentales, seguiré con mi historia.
La mamá Xo ha vivido durante muchos años con esta sombra que se llama depresión, algunas veces ni la percibo, otras veces es como el zapato que chima y que ademas suena raro cuando uno camina.

-"Amor y ahora que estamos embarazados, ¿qué va a pasar con tus antidepresivos?
-"Ah no, no. Yo no quiero para nada tomar esto estando embarazada, jamas,me da mucho miedo. Ademas me he sentido tan bien que no creo que pase nada... Tengo mi antidepresivo en mi pancita"

Si, yo tomo antidepresivos, y eso no me hace una drogadicta legal por estas pastillitas de la felicidad, tampoco ando medio dormida sin poder conversar con nadie. Yo tomo antidepresivos y le quito unos cuantos kilos al peso de mi mente, se apagan muchos pensamientos invasivos y poco constructivos, y muy importante también: me planta en la realidad en vez de volarme en fantasías (bonitas y feas) sobre "todo lo que quiero hacer" y "todo lo que pude haber hecho"
El primer mes que lo pase sin antidepresivos pasó sin mayores acontecimientos, feliz de descubrir mis superpoderes como el olfato y el hambre feroz, sin embargo al poco tiempo comenzó la "chimadera en el zapato" y comencé a tener estas sensaciones tan extrañas que provoca la depresión.

"¿Cómo te fue hoy en el trabajo?"
"Diay... Bien... No se, una mierda la verdad, unas presas asquerosas y esos olores, que asco!, la gente si huele feo! Y di no se, la verdad ya estoy harta de que la gente se me quede viendo raro porque estoy gorda"
"Amor, no estas gorda, estas embarazada"
"Es que aun no me veo embarazada, me veo deforme, la ropa me queda feísima, y de fijo la gente me ve y no sabe si estoy gorda o embarazada"

Mi cuerpo era ahora una maquina acelerada creando vida, no esperó a que yo "entendiera" como iba a cambiar, y empezó todo casi que de la noche a la mañana: los pechos aumentaron (mucho) de tamaño, los pezones se pusieron hiper sensibles, cambiaron de color, aumenté de peso, mis pecas en la cara se veían un poco mas, en fin, cosas como estas me hicieron a mi sentirme de alguna manera "expatriada" de mi propio cuerpo, y las sensaciones eran confusas.

-"Mami, ¿el cuerpo vuelve a la normalidad después de que uno tiene al cachorro?"
-¿Cómo a la normalidad?
-Si osea, ¿las tetas vuelven a su tamaño y su color ... No le queda a uno ahí abajo como una bolsa de chorrear café?
- Ah mi amor, ¿porque piensa eso? El cuerpo es tan maravilloso que si, todo vuelve a la normalidad
- Yo tengo miedo de que me quede todo flojo y mi coño (si, yo le digo coño) me quede como una sandia explotada
- Ah ¿porque se preocupa? Ademas es por tu bebe, por tu hijo, a uno esas cosas no le preocupan

Pero a mi si, y me hacían sentir ansiosa y culpable, pensando que no me tenia que importar mi cuerpo, pero no lo podía evitar ... ¿Eso me hace una mala mama? ¿Ser que soy tan egoista que me importa mas como me veo yo y no como este mi bebe? 

- Alo? Si doc vea esque yo le quería decir, últimamente me he sentido muy mal, me siento muy triste y tengo mucho miedo. No quiero comer nada, de hecho ni siquiera quise desayunar, ya no quiero comer y a ratos siento que no puedo seguir así, no se como o porque pero
- Si, Xochitl, pero yo como le puedo ayudar?
- Bueno si... Doc esque yo he estado pensando ... No sera mejor que yo vuelva a mis antidepresivos? Es que me siento muy mal
- Xochitl, sí hay antidepresivos que los puede tomar embarazada inclusive amamantando, yo he llevado embarazos completos con esta medicación y no pasa nada, a veces son mas los beneficios. La idea es que usted disfrute esta etapa, y  que bebe este bien. Hable con su psiquiatra, dígale que yo he trabajado con ese medicamento, a ver que opina el y me vuelve a llamar, ok?
- ¿De verdad no pasa nada doc?
- Llámelo y hable con el también, y nos hablamos ahorita ¿si?
- Ok, esta bien

Tomar antidepresivos durante mi embarazo nunca fue mi plan, pero tampoco lo era deprimirme, dejar de comer o pensar si mi embarazo era mas bien un error. Si, yo pensé muchas cosas en los primeros 3 meses de embarazo, porque la depresión a veces se siente como un gran titiritero manejando cuerpo y mente. Medicarme de nuevo me cambió completamente, lentamente mis pensamientos necios se fueron apagando y comencé a recordar lo rico que se siente tener la mente calmada. 
Ser mamá es muy bello (y muchas mas cosas) pero yo no tenia mi "antidepresivo en la pancita", yo tenia a mi hijo en mi pancita, y mi hijo tiene a una mama depresiva, que se cuida y procura no dejarse hundir, pero no siempre se logra. 
Reconocerse débil es de valientes, y saber delegar es una sabia decisión, sobre todo cuando la cabeza de uno es un cablerío medio mal armado.


"That's the thing about depression: A human being can survive almost anything, as long as she sees the end in sight. But depression is so insidious, and it compounds daily, that it's impossible to ever see the end. The fog is like a cage without a key".
Elizabeth Wurtzel  




2 comentarios:

  1. Me impresiona profundamente lo lindo que escribes. Pero me impresiona más lo valiente que eres. Bebé podrá saber que su mamá es depresiva. Sin embargo, lo que más recordará siempre es que su mamá es la más amorosa que le pudo tocar en suerte. Estoy muy orgulloso de vos.

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  2. Ah papinno hermoso! muchas gracias! Te amo con todo mi corazon! :)

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